(Música de fondo: Roqueta to the moon de Lost Acapulco, nada más la primera parte)
Al final del año uno desecha todo lo que ya no necesita o lo que no le sirve, hacer una lista de bendiciones que s han recibido en el año ayuda a ver que la vida es como cada uno quiere que sea (bla, bla , bla) y si no, pues a echarle ganas...
Me alegro de haberme dado cuenta quién realmente es amigo y quién no, dónde es mi patria, donde me siento extrangero, de haber desechado aquello(s) que me estorba(n) y descubrir lo que falta por tirar. Puedo agradecer todo aquello incómodo y doloroso que viví y que me llevó a lugares y brazos mejores, je je.
Doy gracias por el Cielo Estrellado que llegó a mi vida, por mis grandiosos maestros y compañeras de la especialidad, por toda mi familia, por el aire que aún puedo respirar, por el Sol, los pajaritos, el viento en mi cara, los amaneceres, los árboles del Parque Morales, la lluvia de Xilitla, toda la energía que dejó el Tío Roberto en esta dimensión, los dones postmortem de mis abuelos, por los libros, las buenas películas, la música, la noche y sus estrellas, la Luna, la inocencia de algunos niños, la risa de Oly, los chistes de mis amigazos, cada berrinche que hice (por malo que fuera), las pocas horas de sueño de este último semestre, cada palabra que me dio vida, por todo el tiempo compartido con mis amigos y los buenos deseo de aquellos que hace mucho que no he visto.
Doy gracias por la Verdad, la Luz y la Libertad.
Hasta el próximo año... Feliz y muy Próspero Áño Nuevo. ¡Bendiciones!
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